La accesibilidad es la actividad de hacer cualquier tipo de espacio, apto para todas las personas. Existen centros comerciales accesibles, hoteles e incluso parques. Algo de lo que poco se habla es de las playas accesibles. En este artículo, te mostramos las maravillas de contar con una, y cómo se pueden construir.

En cualquier caso, si eres una persona con movilidad reducida, pero aun así quieres divertirte y salir un poco, podrás contar con un servicio de turismo accesible, que adapta cualquier área de forma efímera, para que puedas disfrutar de ella sin ningún tipo de problema.

El turismo accesible es una de las maravillas del mundo actual, y cada vez está tomando más relevancia, debido a las aplicaciones que este tiene. En una época en la que estamos más conectados que nunca, también hay que otorgar este beneficio a las personas que menos pueden.

Importancia de las playas accesibles en España

Hay más de 2,5 millones de personas con movilidad reducida en España. Tan solo el 26 % de ellas, es capaz de moverse por su cuenta. El otro 74 % necesita ayuda de un amigo o familiar a la hora de salir. Sin embargo, el 4 % de ellos no tiene forma de recibir este tipo de ayuda, por lo que nunca sale de casa.

La gran mayoría de ellos ha visto afectadas sus vacaciones por no contar con espacios que cumplan con sus necesidades de traslado. Desde rampas, hasta estacionamientos. La accesibilidad es un tema que afecta a 2,5 millones de españoles, y que seguirá afectando, hasta que no se haga un cambio.

Las soluciones de accesibilidad no solo afectan a los edificios. También lo hacen con la naturaleza y, por supuesto, las atracciones turísticas. En este sentido, las playas accesibles son una realidad bastante seria y que, además, se debe tener en cuenta a la hora de pensar en el turismo alrededor del país.

Regulación legal acerca de las playas accesibles en España

Las playas accesibles no solo cuentan con una planificación estructurada. Existe también una regulación legal, que aplica no solo para las playas, sino también para el concepto de accesibilidad universal.

La Ley 51/2003, de 2 de diciembre, de igualdad de oportunidades, no discriminación y accesibilidad universal de las personas con discapacidad. Esta establece, en su artículo 4, la vulneración del derecho a la igualdad de oportunidades, como cualquier tipo de discriminación, directa o indirecta, acoso e incluso el incumplimiento de los requerimientos de accesibilidad y la realización de ajustes al entorno.

De esta forma, la carencia de playas accesibles o cualquier tipo de mecanismo para que las personas con discapacidad puedan disfrutar del turismo, es un tipo de vulneración al derecho a la igualdad de oportunidades. La ley también define qué son las medidas contra la discriminación, establece las condiciones básicas de accesibilidad y no discriminación.

Elementos imprescindibles para las playas accesibles

Ya hemos hablado acerca de la importancia de la accesibilidad en las playas y la regulación legal que existe detrás de las mismas. Sin embargo, ¿cómo podemos hacer las playas accesibles?

Lo primero que debemos pensar es en la accesibilidad en el entorno. Principalmente, un estacionamiento cercano a la playa, con algunos puestos reservados para personas con movilidad reducida. Luego, un acceso seguro desde el estacionamiento hasta la vereda de la playa.

Por supuesto, a esto se le añaden paradas de transporte público accesibles, señalización para identificar que la playa cuenta con mecanismos de accesibilidad y, por último, servicios higiénicos.

Luego, se encuentra todo lo relacionado con el disfrute de la propia playa. Lo primero en lo que podemos pensar es en veredas amplias, que permitan el paso de las personas en silla de ruedas y que tengan al menos metro y medio de espacio libre.

Luego, la carencia de cartelerías a al menos 2 metros y medio, que podrían representar un peligro para personas con discapacidad visual. Del mismo modo, el suelo se debe encontrar en excelentes condiciones: pavimento sin ningún tipo de huecos y, por supuesto, antideslizante, tanto en seco como mojado. Se deben evitar a toda costa los desniveles y las escaleras.

También, sería necesario colocar rampas en las playas accesibles, que den paso hacia la playa, con una caminadera para que cualquier persona pueda disfrutar de ella. Por último, una zona sombreada, que esté reservada para personas con cualquier tipo de discapacidad.

Las playas accesibles son algo relativamente nuevo, pero que con el paso del tiempo va tomando forma. Esperamos haberte ayudado a sentar las bases para construir muchas más playas accesibles en España, acordes a la ley y las necesidades de las personas.